D&D 4a edición (2)

Cuando jugaba Advanced D&D 2a edición en la universidad, siempre se presentaban los mismos problemas:

• El mago moría con un sólo golpe de espada después de haber lanzado su único conjuro disponible a nivel 1.
• El mismo mago conseguía llegar al nivel 2 cuando ya el guerrero y el sacerdote estaban por alcanzar el nivel 3 y el bribón ya iba por el nivel 4.
• El druida/sacerdote tenía por lo menos un conjuro que nunca tenía la oportunidad de utilizar y no había ninguna forma de cambiarlo.
• El alineamiento se convertía en un problema más temprano que tarde.
• Todos nos confundíamos con eso de que la CA y las tiradas de salvación eran mejores mientras fueran más bajas, mientras que las tiradas de ataque eran mejores cuando eran más altas.

La 4a edición soluciona todos esos puntos.

• Todas las clases comienzan con un número de puntos de golpe (PG) superior al daño máximo de las armas estándar, lo que le permite incluso a los magos sobrevivir a más de un golpe.
• Todas las clases requieren la misma cantidad de experiencia para subir de nivel.
• La gran mayoría de los poderes ocupan nichos de utilidad específicos, haciéndolos igualmente valiosos. Además existen reglas de re-entrenamiento, lo que permite cambiar las malas elecciones.
• Existen sólo 5 alineamientos (Legal Bueno, Bueno, Malvado, Caótico Malvado y Sin Alineamiento) y las restricciones ligadas al alineamiento son mínimas.
• Desde la 3a edición, D&D es juego del sistema "d20", lo que significa que todo se resuelve lanzando un d20, sumándole los modificadores correspondientes y tratando de superar un número específico. En otras palabras, más siempre es mejor.

Eso por ahora. Más adelante más detalles.

D&D 4a edición

Uno de mis demasiados hobbies son los juegos de rol, específicamente Dungeons and Dragons ("Calabozos y Dragones", pero todo el mundo usa el nombre en inglés).

Hace algunos años comencé a jugar Advanced D&D 2a edición. Y aunque seguí la evolución del juego, nunca llegué a entender completamente las ediciones 3a y 3.5. Simplemente había demasiado material y las combinaciones eran bastante engorrosas. Además nunca me gustó la "soltura" con que se podían mezclar las clases; nunca le pillé la lógica a eso de "ok, ahora q subí al nivel 3, voy a escoger 1 nivel de bardo, así seré un personaje de nivel 3, bardo nivel 1 / mago nivel 1 / monje nivel 1". De hecho, sigo sin pillársela. Debe ser por lo mismo que jugar Neverwinter Nights nunca fue tan entretenido como jugar Diablo II.

En el último tiempo he estado muy interesado en la 4a edición de D&D. Al comienzo fue como "quién eres tú y dónde está el verdadero d&d???", pero ahora que ya he leído más, resulta bastante interesante.

D&D 4a edición presenta un cambio drástico respecto de las ediciones anteriores: todas las clases cuentan con los mismos tipos de recursos a su disposición. Antes jugar con un guerrero era tremendamente aburrido. Simple, pero aburrido. Y por otro lado, jugar con un mago era muy complejo, con todo ese asunto de escuelas de magia, componentes, rangos, conjuros diarios y etc. Sin duda divertido por la variedad de opciones, pero complejo. Ahora todas las clases están en un punto intermedio, con unas cuantas opciones pero no demasiadas para no volverlo tan complicado.

Otro cambio no menor de esta edición es la incorporación del concepto de "rol" de las clases. Existen 4 roles distintos: controller ("controlador"), striker ("golpeador"), leader ("líder") y defender ("defensor"). Los defenders atraen a los enemigos hacia sí mismos, protegiendo a sus compañeros. Los controllers hacen daño a varios enemigos a la vez y causan diversos efectos en ellos. Los strikers se mueven por el campo de batalla haciendo mucho daño con cada golpe. Los leaders ayudan a sus aliados, otorgándoles bonos o curándolos. En otras palabras, todos tienen algo importante que hacer siempre. Como ejemplo, clérigos y bardos son lideres; bárbaros y bribones son golpeadores; magos y druidas son controladores y guerreros y paladines son defensores.

Sólo estas dos cosas ya hacen interesante el juego. Y aún hay más.

Próximamente más detalles.

Hoy me bañé con agua helada

...y más encima me equivoqué de blog al postear esto.

Definitivamente es martes.